30 de noviembre de 2011

Enamorada de Florencia

De viernes para sábado sólo dormimos menos de 3 horas. Con el cansancio encima y las ojeras de la amanecida nos encaminamos hacia Florencia. Gracias al maquillaje que hace milagros y las gafas que camuflajean todo.
Tomamos el tren desde Ferrara a Bologna y de ahí hasta Florencia. Un flecha roja y en poco más de dos horas llegamos a nuestro destino.
Tan pronto llegamos a la estación de tren en Florencia buscamos la oficina de información para obtener un mapa del área y saber donde se encuentran las atracciones principales. Las calles llenas de gente como toda zona turística. Nos detuvimos a tomarnos unas fotitos graciosas y luego continuamos hacia la Catedral de Santa María de Fiore, notable por su cúpula. Es una de las obras maestras del arte gótico y del primer Renacimiento italiano.
Luego llegamos a la Plaza de la Señoría donde se puede percibir el Palacio Viejo y el área mejor conocida como el centro de la vida social de esta hermosa ciudad. Pude ver la copia del David en esa misma área y el Corredor de la Señoría, conocido como la galería de las estatuas.
Continuamos nuestro recorrido hasta el río Arno que cruza por el centro de Florencia. Una de las experiencias más bonitas fue poder remar con el equipo del Teletón italiano que se encontraba recaudando fondos ese día.
El gelato no podía faltar. También pude ver el Palacio Pitti y el Palacio Medici Riccardi. Mi guía turística como siempre hizo excelente trabajo. Tomamos el tren de las 4:30 de la tarde y regresamos a Codigoro para una cena especial.

Tres besos

Como dice la canción de Aventura: "un beso significa, amistad, sexo y amor. En cualquier parte del mundo no importa la religión". Estan en todo lo correcto pero las variaciones de besos en cada país son muchas. En Estados Unidos casi nunca se le da un beso a una persona en el cachete a menos que sea super especial. En Puerto Rico siempre se da un beso como saludo a conocidos. Pero las cosas han cambiado para mí en los últimos meses. En Mallorca se saluda con dos besos, uno en cada cachete. Me he acostumbrado a dar los dos besos pero llegando a Italia la historia cambió. En este maravillo país se saluda con TRES besos y siempre se comienza por el cachete derecho.
Lo bonito del caso fue que estuve repartiendo besos a diestras y siniestras durante los días que estuve de visita. Se dan tres besos a las personas con las que tienes confianza. Con o sin besos mi estadía fue sumamente placentera, me sentí como si estuviera en mi casa.

¿Estamos en un funeral o en una disco?

El viaje era corto pero había mucho que hacer. Mi guía turística había destinado el viernes en la noche para ir a disfrutar de la vida nocturna.
Nos fuimos para la disco al estilo italiano en el área de Porto Viro. El frío estaba insoportable y por masoquistas nos fuimos de trajecito con medias y botas.
La disco muy amplia. Eso sí como siempre me paso comparando como se hacen las cosas en diferentes lugares pues obviamente tengo que describirle mi experiencia. A la entrada te entregan una tarjetita que mantiene al día todo lo que hacer a través del transcurso de la noche. Ya sea para pagar por la entrada, lo que consumiste de alcohol o si dejaste tu abrigo guardado durante toda la noche. La música movida pero siendo latina no se compara con mis gustos musicales. Casi nadie estaba bailando en la pista.
Estaban o en las esquinas o bebiendo. ¿Quién va una disco a quedarse tranquila? Aparentemente es así que se dan las cosas. Hasta las bailarinas exóticas parecían haberse tragado una varilla. Sus movimientos eran mínimos. Después de un mojito entramos en ambiente y nos pusimos a bailar y pues a contemplar a los chicos lindos y ver algunos hacer el ridículo.
Ah pues cabe destacar que uno de los mejores Dj's de Italia estaba tocando esa noche. Tommy Vee, aparentemente muy conocido en el género de "house".

¡Mamma mia que fogosos los italianos del área sur!

Sólo llevaba un día en Italia y recorriendo las calles de Ferrara me pude dar cuenta de lo guapo que son los hombres en este país. Altos, corpulentos y con faciones muy finas.
El radar estaba activo y hacia comentarios de vez en cuando con mi amiga en cuanto a la puntuación del 1 al 10. Lo cierto es que algunos muy disimulados, otros no tan discretos a la hora de quedarse mirando. Según mi amiga el hombre italiano tiene una fijación con las mujeres latinas, las encuentran exóticas. Mientras observabamos los diferentes productos en el mercado, nos acercamos a un puesto siciliano de quesos. Sin mirar detenidamente continuamos a un puesto de piadenas. Diana me explicaba de que estaba hechas estas tortas y cómo se comen. En el trasfondo escuchabamos a un chico italiano tratando de hablar español, piropeando y pidiendo que nos acercaramos a su puesto de quesos.
Mi amiga me dijo vamos a tomarte una foto mientras pruebas los quesos. ¡Vale perfecto! Quería tener muchos recuerdos de Italia. El chico super emocionado y muy guapo por cierto. Diana para calmarle la emoción le dijo que se tomara una foto conmigo. ¡Que me ha agarrado por el cuello y la cintura y me ha pegado un beso en el cachete que no me lo esperaba! ¡Ah pero yo inmobilizada no me rehusé para nada!
Aclaración no todos los italianos son fogosos y apasionados. Los chicos del norte son más tradicionales y tranquilos mientras que los del sur ufff no pierden una mínima oportunidad. Ya luego les cuento con más detalles el resto de los guapos que vimos.

Explorando Ferrara

Viernes temprano en la mañana Diana me levantó con un cafecito auténticamente italiano. Nos preparamos y salimos a dar una vuelta por Ferrara. Ferrara es una ciudad a una hora aproximadamente de Venecia con una población de unos 136 mil habitantes. Es conocida por ser parte del "Patrimonio Mundial de la Humanidad" y como la ciudad de las bicicletas. Los ciclistas al ser tantos tienen muchos privilegios.
En el centro de la ciudad se encuentra el Castello Estense (Castillo de los Este, también llamado Castillo de San Michele), un edificio de ladrillo de planta cuadrada dotado de cuatro torres defensivas y rodeado por un foso de agua. De la mano de esta estructura están las cuatro paredes que rodean la ciudad.
Caminamos por las calles de la ciudad, haciendo parada en una panadería para degustar algunas de las delicias hechas a base de pan. El día estaba perfecto, soleado y con un friíto intenso. En las calles se vendía de todo desde ropa, zapatos hasta diferentes tipos de comidas y dulces típicos italianos. En nuestro recorrido también nos topamos con la Basílica Catedral de San Jorge Mártir, mejor conocida como la Catedral de Ferrara. Los detalles de la catedral impresionantes. Mi guía turística (Diana) me explicó varios detalles de la ciudad.
Al salir de Ferrara recorrimos otras ciudades cerca de Ferrara. Los paisajes bellos especialmente ya que esta área se dedica a la siembra de peras, melocotones, sandías y producción de papel entre algunos.
También cruzamos el Il Po, el río más grande de Italia.
Esa tarde conocí algunas de las amistades de Diana. Katia, una de sus mejores amigas y Antonino, quien es "carabinieri" de profesión. Todos muy simpáticos, me trataron fenomenal, como si me conocieran de toda la vida.

¿Por qué han parado la película?

Después de haber estado viajando por más de 8 horas y finalmente haber llegado a Italia que mejor manera de relajarme y reirme con una película de comedia italiana.
Diana, su hija y un amigo me llevaron a ver la película "Anche se e amore non si vede". El nombre del filme traducido al español, " Incluso si usted no ve es el amor ", trata de dos amigos que tienen un negocio de turismo y uno de ellos está totalmente enamorado de su novia. Hace todo lo posible por recordarse de todas las fechas de aniversario y los regalos siempre tienen fotos de ellos juntos.
Un filme sumamente gracioso aunque no entendí todo porque obviamente estaba escrito en italiano. Los protagonistas son dos de lo más reconocidos comediantes de Italia, Salvo Ficarra y Valentino Picone. Ambos anualmente producen un filme para la época navideña.
Lo más gracioso de la película, la pausa que se hace en el cine para que la gente valla al baño o compre algún aperitivo. Justo en medio del filme apareció en la pantalla en letras gigantescas "INTERVALO". Que cortesía para que no te pierdas ni un detalle de la película, la detienen por 5 minutos. Cada país tiene sus diferencias y me encanta aprender acerca de la diversidad. Al culminar la pelíula nos dirigimos a comer. ¡Hacia hambre! Pedí una pizza personal con "prosciutto", queso y rúcula. Una pizza sumamente deliciosa, con masa fina, con la cantidad exacta de salsa de tomate y cocinada a perfección.
Durante la comida comentamos acerca de la película y hablamos de mi viaje. Al llegar a la casa, me duché y caí rendida en los brazos de Morfeo.

La vita italiana e bella...MAMMA MIA!

La emoción no me dejaba pensar, la hora cero había llegado. ¡Italia me esperaba! Levantada desde las 5:00 de la mañana me dirijí al aeropuerto de Palma. De ahí tomé mi primer vuelo con destino a Barcelona. El vuelo fue corto, sólo 35 minutos en el aire. Al llegar a Barcelona y sin tener la hora correcta me apresuré para hacer el "check-in" para solo darme cuenta que tenía más de una hora de espera.
De Barcelona el vuelo se dirigía hacia Milán. Este vuelo fue de poco más de una hora. Al llegar a Milán (Bergamo) tomé un bus hasta la estación del tren, compré mi boleto hasta Ferrara y comencé una hermosa odisea.
El tren "Flecha Roja" te lleva a tu destino en la mitad del tiempo que tomaría llevarte en un tren regular. Mi primera parada fue en Bologna para luego tomar otro tren hasta Ferrara.
Con los nervios de punta, imagínense que nunca había estado en Italia y mucho menos sabía como funcionaban los diferentes métodos de transporte, pregunté cúal tren debía tomar y me dijeron que hacia menos de 5 minutos que había pasado. Me quería arrancar las greñas pero terminé preguntando en la boletería y me dijeron que el próximo tren pasaba en unos 15 minutos. Llegué a Ferrara y buscando en las afueras de la estación rápidamente encontré a Diana. ¡Que felicidad después de un largo día de viaje recibir una alentadora bienvenida!
De Ferrara ella manejó hasta el pequeño pueblo de Codigoro donde reside junto a su hija. En el transcurso no pude apreciar mucho la vista porque ya había oscurecido y había mucha neblina. Al llegar a su casa nos relajamos un poco y después salimos a ver una película y a cenar.

21 de noviembre de 2011

Fira de La Mel 2011

Después de un fin de semana de puro ocio, la espontaniedad dormida despertó en mí. Luego de haber ido a misa el domingo la poderosa red social de "facebook" me informó acerca de un feria dedicada a la miel y sus numerosos derivados gastronómicos.
Sin pensarlo dos veces busqué el horario del bus y que casualidad que la próxima guagua salía de Palma a las 12:30 de la tarde. Mi destino final Llubí, pequeño pueblo de no más de 3 mil habitantes en la parte norte del centro de Mallorca. Al llegar al centro del pueblo en la Plaza la Carretera se veían los puestos con las diferentes mieles artesanales, material para apicultura, distintos productos relacionados con la miel, además de empresas vinculadas al área.
El primer puesto que me llamó la atención fue el de Hidromel. Esta bebida alcohólica elaborada a base de miel y agua en un proceso de fermentación. Mientras más fría se tome mejor.
De ahí continúe caminando alrededor de la plaza viendo los diferentes productos que cada vendedor y en ocasiones degustando alguno de ellos como la sobrasada y las aceitunas que no pueden faltar en el plato mallorquín. Hasta la fuente principal se había vestido de color miel.
Con esta feria que se lleva celebrando por doce años cerré mi fin de semana.

19 de noviembre de 2011

Dijous Bo en Inca

La agenda estaba marcada hacia días; 16 de noviembre fiesta en Inca. Dijous Bo es una de las ferias más importantes de Mallorca celebrada el jueves después del cuarto domingo de ferias (fiesta de Santa Maria la Major) en el mes de noviembre.
Durante el día hay feria agrícola y ganadera donde se unen vendedores, expositores, compradores y paseantes.
Los planes eran tomar el tren en la noche y caminar por las calles para disfrutar de la gran celebración. Pero mis planes cambiaron radicalmente al recibir una invitación especial de parte de una de las profesoras en mi colegio. Para cambiar un poco de ambiente acepté participar de esta festividad al estilo mallorquín. Tomé el tren hacia Inca a eso de las 8:09pm y estaba totalmente lleno. Nunca había visto el tren en esa dirección estar tan lleno pero me lo habían advertido. Al llegar a Inca y caminar por las calles del centro los aires de fiesta se sentían en la atmósfera. Lo localidad del piso de la maestra era perfecta, desde su balcón se podía ver parte de las celebraciones, muy accesible para caminar. La fiesta comenzó con el arribo de sus amigos que traían comida y bebida. La música no podía faltar. Se repartieron camisetas con un logo especial creado para la ocasión. Hasta yo recibí una. Es tradición crear un diseño y el grupo de amigos se pone la camiseta para salir a la calle.
Mientras la noche avanzaba Paco compartió su repertorio de chistes y empezó una sesión de "karoeke" con temas interpretados por música típica mallorquina, Rocío Durcal, Sergio Dalma, Julio Iglesias entre algunos. El reloj marcó las 2:00 de la mañana, hora se salir a la calle a disfrutar de la fiesta en pleno apogeo. En todas las calles se percibía "DJ's" tocando diferentes géneros de música.
La gente con sus tragos en mano entre amigos, bailando, riendo, divirtiéndose. Así de bien la pasé yo. Lo más extraño de la noche estar bailando y un hombre desconocido se nos acercara a darnos chupachups y gomitas.
A las 5:00 de la mañana el cansancio dominó y cada cual tomó su ruta hacia los brazos de Morfeo.

13 de noviembre de 2011

A cuatro mil pies de altura

El domingo en la mañana prometía ser un día soleado y de brisa agradable, por lo menos así se veía desde mi balcón. Con la mochila llena de comestibles, agua y un buen abrigo nos dirigimos a encontrarnos con una de las maestras con las que trabaja mi compañera de piso. Nuestro destino estaba muy claro; escalar el Puig Major, el punto más alto de la isla de Mallorca con una altura de 4,740 pies. Subiendo en coche el tamaño y altura de esta área montañosa me parecía desafiante. Me preguntaba cómo carambas treparíamos hasta el tope.
Al bajarnos del auto y prepararnos para nuestro recorrido el viento y el frío nos golpearon fuerte. El comienzo del senderismo no estuvo tan complicado pero sí bastante pedregoso. En una hora ya podíamos ver claramente el mar.
El viento y el frío aumentaron grandemente. A este punto al otro extremo de la montaña se podía observar el embalse artificial de agua Gorg Blau y Cúber, que abastece a toda la isla.
Continuamos subiendo el tramo más difícil por lo empinado y sobre todo por el derrumbamiento de algunas piedras y finalmente llegamos al tope donde almorzamos entre medio del paraíso y la tranquilidad de la naturaleza.
A nuestras espaldas se observaba el radar utilizado por el ejército y que fue instalado por los americanos en el año 1958.
Miedo me daba al observar los precipicios pero confiaba en el conocimiento Inma, Andreu y Seba que en más de una ocasión han escalado esta montaña en la Sierra Tramuntana.
Nos explicaron dos de las técnicas básicas para descender la montaña; deslizarnos como si estuvieramos esquiando pero de lado siempre o deslizarnos sentados. Con la inexperiencia terminé cayéndome en varias ocasiones sobre las piedras o los cojines de monja, arbustos llenos de espinas llamados así por el temperamento fuerte de la mayoría de las religiosas.
Terminé con los tenis llenos de piedras, los pantalones aboquetados y sucio por todos lados. Definitivamente valió la pena el recorrido de poco más de 4 horas en el que pude conocer un lugar nuevo de la isla y compartir con personas super amigables y dispuestas a compartir su conocimiento y entusiasmo por escalar. Luego de regresar nuevamente al coche visitamos el pequeño pueblo de Lluc donde nos tomamos una caña (cerveza) y visitamos su Santuario. Mañana ya me imagino que no pobré mover ni las piernas ni las manos.